En la confusiòn que luces y sombras dibujan en nuestra conciencia, vamos andando...
vamos para allà porque parece que es el camino...
giramos allì porque algo nos empuja...
y la confusiòn gobierna nuestra ruta.
Las flores ayudan en principio, a ver con claridad y comprender nuestra propia luz y sombra.
Alli comienza el trabajo, volviendo a casa.